< V >





Nosferatu camina por la calle.

Se siente bien.

Se detiene a mirar un cubo de basura. Se da cuenta que la basura nunca podrá ser su amiga y tampoco lo podrá ayudar. Con este pensamiento se aleja.

No hay nadie en la calle.

Nosferatu oye pasos que se arrastran detrás de él. Piensa: "Alguien quiere ser sigiloso".

Nosferatu se da vuelta, rápido.

Allí está. Es una persona de tamaño promedio, con una lanza de madera en la mano.

El hombre dice: "He venido por usted, Nosferatu. Usted, quien ha vivido miles de años. Le llegó su hora ¡Deberá morir!"

"Lo has conseguido", dijo Nosferatu: "me muero… pero de miedo".

"Voy a matarte", dijo el otro: "¡soy un experto cazador de vampiros!"

"Está arruinando mi noche, caballero".

"No estoy de juegos. Pronto estará muerto".

"Me siento solo, ¿quiere jugar conmigo?"

"No, no vine a jugar; ni tampoco vine a ser su amigo. He hecho un juramento, el de acabar con los de su especie".

"Qué racista".

"No soy ningún racista".

"Sí, sí que lo es", replicó Nosferatu: "usted dice querer matar vampiros sólo porque son vampiros, eso se llama racismo, caballero".

"No, no lo es. Ustedes son unos monstruos asesinos sedientos de sangre".

"Estereotipos".

"Escuche, no me haga perder la poca paciencia que me queda. Soy mejor que usted, soy humano".

"Me importan muy poco su paciencia y su modo de pensar".

"Debiera".

"Debiera, ¿qué?"

"Importarle mi modo de pensar".

"¿Por qué me debería importar? Los racistas me tienen sin cuidado".

"Escuche, vampiro de mierrrrrrda, ¡sus segundos están contados!"

"Mis segundos son sus años, caballero".

"¿Qué mierrrrrrda tiene en la cabeza, señor? ¡Tome esto con seriedad!"

"Ño".

Nosferatu saca una pistola y le dispara en el vientre.

El hombre cae.

Entonces comienza a putear "Me disparó, vampiro de mierrrrrrda, debería haberle matado cuando pude. ¡Esto no puede ser! ¡Fue injusto! ¡Utilizó un arma! ¡Se supone que los vampiros utilizan sus poderes, no un arma de fuego! ¿Qué mierda tiene en la cabeza?"

Nosferatu mira al hombre y luego le toca con la punta del pie en el vientre, donde tenía la herida de bala y dice: "Pronto estará muerto. Sin embargo, su cuerpo permanecerá aquí en la acera. Alguien va a llegar y lo va a encontrar ahí, yaciendo, y luego, ésta otra persona comenzará a llamar a todos sus amigos".

Nosferatu se aleja.